Mundial 2008

Se terminó el mundial de voley de sordos en el que participó mi hermana. Argentina quedó en quinto puesto. Valió la pena el esfuerzo del equipo que pusieron en la cancha, fue emocionante ver cómo luchaban para ganar. Fueron buenos partidos aunque tuve que ver todos en un dvd, ja! Por mi trabajo, claro!

Pero en el fin de semana estuve en todo el día en el Cenard, en donde jugaron los partidos. Conocí a varios extranjeros como hindúes, turcos, rusos, polacos.

Después de todo un finde perseguida por un hindú, escuchando a mis amigas "Ay! Qué lindo es ese ruso! Noo, ese polaco es lo más! Noo, el turco debe besar bien!, vayamos a sacarnos una foto con ellos!". Claro que no me saqué con nadie, para mí, todos son humanos como yo, lo único que nos diferencia es la nacionalidad. Obviamente la cultura es distinta y es lindo conocerla pero no correría hacia ellos como si fueran celebridades para sacarnos una foto. Es emocionante compartir cultura y eso.

Ese hindú me hablaba todo el tiempo, me perseguía a todos lados, con esos ojos blaquísimos por culpa de su tez oscura, nariz grande y cara aplastada, no sé pero era el hindú más feo de los hindúes y se quería casar conmigo a pesar de tener una esposa embarazada de seis meses. Me decía que en la India estaba prohibido divorciarse por lo tanto no importaba si en un matrimonio, uno le era infiel al otro. Al caracho! Le dije, le daría una patada por el orto! Le dije de vuelta.

Considerando de que tenía un olor impresionante a cebo. Yo sé que los hindúes no son limpios y que casi tuvieron un infarto al ver que existían duchas para bañarse en vez de baldes grandes con agua fría.

Lo peor es que nos sacó una foto a mi papá, mamá y a mí para llevarla de recuerdo a la India y decirles a todos que soy una novia de más pero de Argentina y me pidió que le diera un anillo. Ja! Sobre mi tumba.

Al terminar el mundial, una comisión juvenil de sordos organizaron una fiesta en un barcito por Palermo para despedirnos de los extranjeros. Obviamente, me re prendí y fui allá tempranito para ponerme en la fila. El lugar resultó ser un mediocre, el baño era una mugre, total, totalmente sucio. Al enterarme de eso, ya no quería ver a la cara de los extranjeros al ver ese lugar, no quería que entraran porque iba a ser una vergüenza nacional.

El lugar era caluroso, cerrado con un olor terrible a cigarrillo a pesar de que yo fumo pero calculo que ahí fumé como diez atados ajenos. Muchos ucranianos, polacos, turcos me preguntaron si habían sillas al menos y no sabía qué decirles y les decía que era para bailar y que tenían que divertirse.

Conocí a un polaco hermosisimo, rubio de ojos claros, alto, flaco, un sueño de toda una mujer y nos hablamos en lengua de señas tratando de entendernos pero nos entendimos enseguida pero después no lo encontré más. Al rato lo vi en la barra tratando de pedir un vodka solo, sí, sí, señores, solo, solito! Pero el tarado del barman ni se imaginó que en Polonia y sus alrededores se toma así. Entonces me acerqué y le ayudé a pedir. Y ahí reanudamos nuestra conversación. Obviamente, terminé enredándome con él. Dicen que los europeos provenientes de Rusia son fríos pero él es el más dulce que conocí.

Entramos a la pista de vuelta para bailar y no era una fiesta realmente sino... una fiesta negra! Brasileros besándose con no sé cuántas, turcos felices con argentinas, estadounidenses besándose con argentinos que conozco y ni se imaginaron que ellos ni siquiera terminaron el secundario. Nos quedamos asombrados y nos salimos de ahí.

Mis amigas si que estuvieron metidas en esa fiestita. Al día siguiente me dijeron "me transé a dos turcos, un ucraniano, dos rusos, un brasilero... mm ah! otro turco!" Y yo pensando... "están diciendo países en vez de nombres" (vale aclarar que sus nombres son inentendibles).

Fue una noche rarísima, los extranjeros se llevaron una experiencia rara, lugar mediocre, argentinos bravos que organizaron fiesta negra y no sé qué dirán de Argentina.

Voy a ver qué pasa si me reencuentro con ellos en el próximo mundial 2009 en Taipei... si es que llego a ir!

Ah! Y obviamente, me saqué una foto con el polaco, jeje!