martes, mayo 15, 2007

Tragame tierra

18.35, al fin, caminé hacía el fichero para fichar mi fecha e irme a casa. Cuando estaba caminando, delante mío también estaba mi jefa que se iba del trabajo. Se dio vuelta y me miró de reojo con ganas de reírse y yo no entendía nada. No había hecho nada, "qué raro" me dije porque mi jefa es una mujer muy seria, casi nunca sonríe.

Estaba en el subte pensando y pensando. ¡Ay, no! Me acordé de una escena vergonzosa que tuve con mi jefa.

"Estaba chateando por Messenger con ella, hablando de unos trabajos, estaba explicándome sobre un trabajito y yo estaba escuchándola "atentamente" ya que también estaba chateando con Chocolat. Nos decíamos cosas calientes, nos teníamos unas ganas terribles.
A decir verdad, yo, hablando, soy re pervertida y según Chocolat, mis palabras logran darle de vuelta a su cabeza y volverse loco.

"Gatearía con esa tanguita transparente que me regalaste y vos me cogerías al estilo perrito, el que me re encanta" escribí eso y pulsé "enter".
A cabo de unos segundos, veía la foto de la ventanita "mmm, qué raro, cambió de foto tan de repente Chocolat, encima esa cara de mujer me suena conocida..."
Noooooooooooo, ¡era mi jefa! ¡¡¡Le había mandado todo eso!!! En vez de decirle cosas calientes a Chocolat, le dije de todo a mi jefa!

En ese momento, el calor arrasó por todo mi cuerpo, me transpiré como una loca, mis manos temblaban por lo que no podía teclear nada. Por mi cabeza pasaron muchas excusas para decirle a mi jefa, no sabía qué decirle, tardé mucho en reaccionar hasta que al fin lo logré.

"Perdóname, olvida de todo lo que dije recién".

Ella me siguió hablando como si no le dije nada.

Dios mío, fue una cosa terrible, no hay nada peor que eso. Encima, le conté eso a Chocolat y me dijo (hace cinco años que trabaja en esa empresa) que mi jefa es puritana y católica.
¡Lo quería matar! ¿Para qué me dijo eso? ¿Acaso quería que me pusiera de mal en peor? Él se rió mucho y me dijo que no me persiguiera, que no pasaba nada, que era normal. Bue, para un católico y puritano, ¿las palabras que le tiré son normales? ¡No lo creo!
Lo peor de todo es que cinco minutos después, fui al baño a tranquilizarme, estaba lavando mis manos y justamente, de muchas horas y ella eligió ese minuto, entró al baño, ¡¡¡estábamos a solas!!! Ni quería mirarle a los ojos ni nada de eso. Al rato, entró mi otra compañera... A LI VIO TO TAL. En ese momento quería besarle de pies a cabeza, ja ja."

Recordé todo eso y mi boca se dibujó una sonrisa... ¡Qué momento aquél!

1 comentario:

El Mostro dijo...

Que buena anecdota!!
Saludos