Es una tortura verte todos los días sin tenerte, una tortura tener que oler tu perfume cada minuto que pasas por mí, una tortura verte a los ojos sin saludarte ni hablarte, una tortura escuchar tu voz y risas, una tortura ver tu sonrisa sin que yo te haga sonreir. Es una tortura amarte sin ser amada. A veces siento tener un ataque de locura y correr a abrazarte y besarte en todas partes sin importar las consecuencias, sin importar si me vas a apartar y decirme "¿qué haces?". Todo es una tortura, es una tortura tener que admitir que soy una loca y paranoica, es una tortura conectarme al MSN y verte conectado e ilusionarme que un día te rindes y me saludes. Es una tortura soñar despierta, que me sigas y te rindas a mis pies y me vuelvas a tratar como a una princesa.
Me estoy desmoronando, me estoy volviendo indiferente a lo que pasa en mi alrededor, a mi cuerpo, a mi salud, a mis sentimientos por otras personas. Vivo porque te puedo ver todos los días, vivo porque puedo averiguar facilmente qué es lo que hacés en tu vida cotidiana ahora que ya no estás conmigo.
Me muero si llego a saber si llega ese día en que no te vea más, nunca más. Me muero si llega ese día en que ya no pueda verte, olerte, escuchar tus voces y risas, contemplar tu sonrisa desde lejos.
Realmente, vos giras alrededor de mi vida, giras y giras y no te sales de la orbita. Lo que pasa es que no quiero que te salgas, aunque es mi intención de todos los días borrarte y verte como a un desconocido.
En fin, es una tortura no tenerte, como amigo, compañero, amante o conocido... por ahora...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario